Los consumidores exigen cada vez más empaques diseñados pensando en nuestro planeta.

Esta conclusión es respaldada por una encuesta reciente que realizó McKinsey, que reveló que casi la mitad de los consumidores en Estados Unidos consideran que el impacto ambiental es una característica de los empaques extremadamente importante o muy importante al momento de decidir hacer una compra. Sin embargo, esa misma encuesta detectó matices en el punto de vista del comprador promedio.

Si bien los consumidores estadounidenses se preocupan por su huella ambiental, también les interesa la conveniencia, la protección del producto, su percepción de una marca y su calidad, y el precio, un aspecto crítico durante períodos de alta inflación. En otras palabras, los consumidores quieren que los empaques reúnan varias características.

La mayoría de los consumidores afirma que están dispuestos a pagar más por un empaque que, en su opinión, satisface todas sus necesidades, según el informe Buying Green de Trivium para 2023. Las marcas pueden ayudar a los consumidores a tomar estas decisiones comunicándoles de manera clara las credenciales de sus empaques.

Según el informe de Trivium de 2023, muchos consumidores estaban muy interesados en los empaques reciclables y los materiales reciclados de los empaques, y el 82 por ciento y el 78 por ciento respectivamente dijo que era probable que compraran un producto basándose en esas características de los empaques. Según una investigación reciente de Boston Consulting Group, el 78 por ciento de los consumidores manifiesta que es probable que compre un producto “hecho con materiales reciclados”, y el 64 por ciento afirma que es importante que los empaques contengan materiales reciclados.

Estas encuestas destacan que las afirmaciones “reciclable” y “contiene materiales reciclados” en los empaques son beneficios que los consumidores reconocen fácilmente y que abordan uno de los problemas importantes para muchos compradores: la duda sobre qué empaque les ayudará a reducir los residuos. Un etiquetado claro que indique si un empaque es reciclable o cuánto material reciclado contiene es un mensaje simple y efectivo que el consumidor cada vez más consciente del medioambiente comprenderá a la perfección.

Los consumidores tienen percepciones positivas sobre el reciclaje de papel y de los empaques en papel. Las últimas investigaciones revelaron que el 66 por ciento de los estadounidenses cree que reciclar papel vale la pena y que al 60 por ciento le resulta fácil hacerlo. Esta confianza aumentará a medida que crezca la visibilidad de los productos envasados con materiales reciclados.

Escuchar las demandas de los consumidores y las marcas de usar más materiales reciclados en los empaques, teniendo en cuenta factores como el precio y la estética, nos llevó a desarrollar nuestra última innovación en cartón. PaceSetter Rainier™ se distingue del cartón PaceSetter porque está hecho de fibra 100 por ciento reciclada, pero ofrece la blancura, el brillo y la excelente facilidad de impresión que esperaría del cartón blanqueado (también conocido como cartón sólido blanqueado de pasta al sulfato o SBS).

Esto significa que las marcas pueden aumentar la cantidad de materiales reciclados en su cartera de empaques y, al mismo tiempo, mantener el aspecto limpio y brillante que necesitan para generar impacto en los anaqueles de los comercios minoristas.

A principios de 2023, Graphic Packaging anunció sus planes para construir una nueva planta de cartón reciclado en Waco, Texas, con el objetivo de producir cartón reciclado recubierto (CRB) de alta calidad. La planta, que espera aumentar la producción para 2026, respalda nuestra visión de un futuro renovable. Cuando esté terminada, esta instalación de vanguardia podrá reciclar volúmenes de fibra equivalentes a 15 millones de vasos de papel al día, lo que aumentará de forma drástica nuestra capacidad de ofrecer empaques en cartón reciclado de alta calidad a los clientes de todo Estados Unidos. Esto se suma a las grandes inversiones en la producción de cartón reciclado en Kalamazoo, Míchigan. Nuestra nueva máquina comenzó a funcionar a principios de 2022, y produce el CRB de mayor calidad de América del Norte empleando menos agua y electricidad.